Nena....

Anoche murió Nena, la gatita Nena, como la llamaba mi sobrina. Mi nenita valiente aguantó como una campeona para que nos pudiéramos despedir...Mi dulce pequeña Nena, torpecica y "apardalá", como yo, a la que le encantaba arrebujarse entre mis sábanas mientras leía y poner su patica sobre el libro, a modo de marca páginas o maullaba y maullaba hasta que le que poníamos de comer, o se encaramaba al respaldo más alto de la butaca mas nueva para comerse el poto del salón...se metía en bolsas, maletas, lavadoras, se comía las cordoneras de mis botas, el cable del portátil, el hilo de los tangas...una joya vamos, jajaja...tierna y tranquila, paciente y bonachona se dejaba hacer de todo por Carolina y Loren...que me ayudó a criar cachorros gatunos y perrunos, entre ellos a Pani...hoy Pompete no se separa de mí. Dormita en la cama mientras escribo esto. Parece que la busca sin buscarla. No guama, ni maúlla, solamente está, en silencio, serio, como de luto...como el día, gris y lluvioso, como llorando...se equivocan aquellos que creen que somos nosotros quienes elegimos a nuestros animales, son ellos quienes nos eligen a nosotros. Y el humano afortunado con la elección tiene la enorme suerte de disfrutar para siempre e incondicionalmente, en las malas y en las malas, del amor más puro, la lealtad más grande, la compañía más fiel y comprensiva que cualquiera pudiera desear. Y de momentos de risa, de ternura, de tristeza, de enfado, de...de tantas y tantas cosas...En mi cielo particular desde anoche brilla la más linda y torpe de la estrellas, la más valiente, la más guapa de todas las estrellas peludas...hasta luego Nena! Hasta luego estrella

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